Debo admitir que me encantan las tartas con bizcochos altos. Son así como muy americanas. Supongo que por la comodidad a la hora de repartir las porciones, aquí en España se suelen hacer pasteles bastante bajitos. Pero reconozco que una tarta alta es mucho más llamativa y luce el doble. ¿Quién no ha visto alguna vez en televisión alguna tarta de chocolate irresistible con un bizcocho de casi un palmo? Sólo de pensarlo se me hace la boca agua...
Aunque Maria José siempre me pide las tartas lo más "expandidas"posibles (o sea, bajitas y anchas), no pude resistirme a usar este formato.
En este caso, el bizcocho era un brownie de chocolate negro, relleno de ganaché de chocolate blanco y bañado con sirope de cacao dulce.
3 comentarios:
so sweet cake...
Bonita, bonita, sencilla y resultona, me encanta la expresión de Pocoyó! jeje
Un besazo, menuda artista!
Preciosa tarta! Sencilla y de muy buen gusto...
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