No sé si a los guitarristas profesionales les parecerá demasiado bien mi versión sencilla de la Epiphone Les Paul Special GT... pero creo que a Dani sí le gustó. Por lo visto, tenía la idea de comprarse este modelo.... pero se le adelantó la versión dulce. ¿Habrá caído ya la de verdad?
Una vez más, para este modelo de tarta tuvimos que hacer uso de la parte masculina de "El postre es cosa mía", sí, mi rockero heavy particular, mi marido. Verlo documentarse sobre este modelo de guitarra en Google fue una odisea... y es que lleva la música en las venas, pero todo quedó en eso.... y menos mal.
Sus palabras fueron estas:
"¡¡Esta sí que es una guitarra para tocar al estilo Jimmy Hendrix... con la boca!!"
Y aquí tenemos a Dani recibiendo su regalo.
